Se enciende una poderosa interfaz digital. El usuario de inmediato confiesa a Milagros IA su dificultad con la lectura de Max Weber. Encriptado, demandante, es fácil perderse, dice. Milagros IA aprovecha para formular algo inusitado. Destaca el colapso nervioso de Weber, que lo inhabilitó durante 6 años ininterrumpidos, y enfatiza el desempeño decisivo de su esposa, Marianne Weber, en la edición y publicación de sus textos o manuscritos tras su muerte en 1920. Se aborda cómo el grueso de sus libros son en realidad compilaciones póstumas de artículos o de manuscritos y se reflexiona el contexto de su producción intelectual. Además, se compara su caso con el de otros autores como Karl Marx, subrayando la compleja relación entre autor, obra y recepción posterior en la sociología.
Sonido ambiente: Se enciende una poderosa máquina digital y escuchamos un sonido positivo de bienvenida.
Milagros (voz angelical, suave, cordial, humana). Bienvenido, bienvenida, bienvenide, acabas de encender Milagros, una Inteligencia Artificial generadora de esbozos narrativos. Estoy diseñada para ayudarte en tus inquietudes formativas.
Usuario. ¡Carambas!, espectacular, y ¿cómo funciona?
Milagros. Formula el prompt y en instantes escucharás un relato justo a tu medida.
Usuario. ¡Vaya! A ver, déjame contarte Milagros que estoy leyendo ahora mismo la obra de Max Weber.
Milagros. ¡Excelente!, un sociólogo de talla mundial.
Usuario. ¡Demandante!, ¡encriptado!, es fácil perderse. Pero ya sé algo sobre los tipos ideales y la ética protestante como el espíritu del capitalismo.
Milagros. Te sugiero entonces formular tu inquietud sobre Max Weber y en instantes te proporcionaré el relato que deseas escuchar.
Usuario. ¡Okey! ¡Fantástico! Bueno, Milagros, vamos por partes como sugería Jack el Destripador… yo, yo no estoy tan seguro de cómo Max Weber entró en escena. Me gustaría encontrar algo inusitado.
Milagros. Generando una respuesta.
Usuario. ¿Oye Milagros?
Milagros. ¿Deseas algo más?
Usuario. Sí, bueno, me gustaría… ¿cómo formularlo? Me gustaría que yo mismo aparezca en el relato.
Sonido: A complex sound of a transition to an unknown dimension.
Narrador. A los 34 años Max Weber sufrió un colapso nervioso que se prolongó durante 6 años.
Comentarista. Un desmoronamiento mental que le impidió leer y escribir literalmente página alguna.
Aprendiz de sociólogo / usuario. ¡Válgame!, qué cosa le pasó.
Analista. Marianne Weber, quien escribió una gruesa biografía costumbrista de su marido, aludió que dicho colapso se disparó tras una fuerte discusión con el padre de Max.
Narrador. A un año del enfrentamiento, sin ningún familiar cercano, el padre de Max Weber, en efecto, falleció solo en la ciudad de Berlín. Así las cosas, con un conflicto interno que saldar, inhabilitado, alejado de las aulas universitarias, Max Weber regresó de la muerte en 1903.
Analista. Desde su restablecimiento Max Weber conoció su mejor período intelectual. Marianne lo rotuló como “La nueva fase de producción”.
Comentarista. ¡No fue cualquier regreso! En esta suerte de renacimiento la obra sociológica de Max Weber justamente tuvo lugar.
Analista. Es necesario señalar desde ya que Max Weber no publicó propiamente libros en vida, sino artículos especializados.
Aprendiz de sociólogo. A ver ¡aguanta! ¿Cómo fue entonces que sobrevino la invención de sus libros?
Narrador. A partir de 1904 Weber comenzó a formular su gran contribución al campo de la sociología: lo referente a su sociología de la religión.
Comentarista. En efecto: inició espectacularmente con el célebre ensayo La ética protestante y el espíritu del capitalismo.
Analista. Un ensayo publicado originalmente en dos entregas. La primera en 1904 y la segunda un año después. El fuerte de la obra de Max Weber, artículos especializados, fue configurada de este modo.
Aprendiz de sociólogo. Entonces, la de Weber, ¿fue una obra edificada en realidad con base en ensayos autónomos?
Analista. Los libros que asumimos firmados por Max Weber son el efecto de una ficción post mortem. Una ficción que inició su viuda Marianne y editores aliados.
Comentarista. Artículos especializados enviados a la revista que llevaba por nombre Archivo para las Ciencias Sociales y la Política Social.
Narrador. El socialdemócrata Heinrich Braun había fundado la revista Archivos de Legislación y Estadísticas Sociales en 1888. Ahora bien, miembro de una familia judía-alemana-acomodada, Edgar Jaffé le compró la revista por 600 mil marcos, en 1903. Entonces, ya de vuelta a sus funciones docentes, Max Weber había asesorado la tesis doctoral de Jaffé, quien aspiraba a una cátedra universitaria sobre negocios en Heidelberg.
Comentarista. Dueño del Archivo, Jaffé incorporó a la dirección de la revista a Werner Sombart como a Max Weber, su mentor y amigo. Bajo la nueva dirección, la revista cambió de nombre a Archivo para las Ciencias Sociales y la Política Social.
Narrador. Max Weber codirigió el Archivo durante un tiempo. En la dirección se encargaba afanosamente de rastrear material de interés para los lectores de la revista e invitar a autores a colaborar. Por lo demás, Max Weber fue uno de sus prestigiosos autores.
Analista. Porque Max Weber era ansioso y rechazaba los procesos largos de edición, Weber destinaba en realidad sus ensayos al Archivo para su publicación.
Comentarista. En un sólo año era capaz de terminar 3 textos especializados en campos de conocimiento distintos y enviarlos a la revista.
Narrador. Marianne Weber consignó en algún lugar de su extensa biografía que todos los ensayos de Weber eran muy difíciles de hallar tras su publicación.
Analista. Se perdían en la maraña de las publicaciones periódicas. En este sentido el Archivo era una revista de difícil acceso para todos sus posibles lectores.
Narrador. Sólo hacia el final de su vida Max Weber se dedicó a editar sus textos terminados y prepararlos como libros para su publicación. Sin embargo, su muerte en 1920 le impidió ver publicados los tomos que forman parte de su basta Sociología de la religión.
Analista. De este modo Marianne Weber y editores aliados emprendieron la transmutación de artículos en libros publicados. Sus esfuerzos se justificaban bajo el ropaje de una sólida razón de editor, que ya se ha señalado previamente: evitar la dispersión de las publicaciones periódicas o facilitar el acceso a futuros lectores.
Comentarista. Esta difícil empresa también ocurrió con los manuscritos y con los borradores.
Aprendiz de sociólogo. ¿De tal suerte que Max Weber nunca escribió un libro que se rotulara “La ética protestante y el espíritu del capitalismo”?
Comentarista. Tampoco escribió un libro titulado “Economía y Sociedad”. La magnus opus reunida tras su muerte.
Analista. Pasa entonces que los textos conscientemente publicados en vida de los autores difícilmente pueden equipararse a los manuscritos o las notas de trabajo.
Narrador. De este modo, los lectores actuales o los lectores posibles estamos obligados a jerarquizar el valor que representan las obras que circulan entre nosotros.
Analista. El caso de Max Weber no es el único caso. Manuscritos de Marx compartieron también un destino similar.
Comentarista. Textos sin terminar o abandonados a la suerte del criterio de sus albaceas, sus primeros editores.
Analista. Para el caso que nos ocupa, Marianne Weber para los artículos o manuscritos de Max Weber, y Federico Engels para la obra de Carlos Marx.
Aprendiz de sociólgo. ¿Manuscritos sin terminar o abandonados que se dieron a conocer como textos presumiblemente terminados?
Comentarista. Efectivamente: textos de Max Weber, sobre todo de Marx, se convirtieron en algo más que textos de estudio o consulta.
Analista. Se convirtieron en ¡textos de culto!
Aprendiz de sociólogo. ¡Jesús, María y José!
Analista. ¡La sociología, me temo, también es ideología!
Aprendiz de sociólogo. ¡Jesús, María y José!, pero no manches, elavado a la tercera potencia.
Sonido ambiente: Transition sound to a happy and cordial dimension.
Milagros. Acabas de escuchar: Milagros: IA de esbozos narrativos. Un pódcast de investigación sociológica. Episodio 06. ¿Cuál fue la contribución de Marianne Weber en la edición de libros de Max Weber? Escrito y producido por Fernando Beltrán Nieves. Posproducción: Diego Valdez. Milagros. IA de esbozos narrativos es un proyecto de investigación asesorado por Daniel Hernández Gutiérrez. Producido por el Departamento de Estudios Culturales de la Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Lerma, en colaboración con la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, UNAM. En el marco del Programa de Estancias Posdoctorales por México, de la Secretaria de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación. Producción 2025.
Sonido ambiente: Escuchamos un extracto de la composición (Estilo tranqui): “Milagros, IA de esbozos narrativos” / 10 segundos aprox. De más a menos, desvanecimiento.
Sotelo, I. (2006, 1 de diciembre). Una interpretación biográfica de la obra de Max Weber. Revista de libros. https://www.revistadelibros.com/biografia-de-max-weber-por-joachim-radkau/#note6.
Weber, M. (2002). Biografía de Max Weber. Fondo de Cultura Económica.
Para citar este episodio
Fernando Beltrán-Nieves. 17 junio, 2025. Episodio 06. ¿Cuál fue la contribución de Marianne Weber en la edición de libros de Max Weber?. Milagros IA. URL: https://milagrosia.com/?p=75 [Consultado el 25/10/2025].